ADAM HUGHES - Good Girl artist -

Dentro de la industria del cómic gringo un artista se puede hacer fama de muchas maneras. La más lógica tiene que ver con la misma habilidad del dibujante, entintador o colorista.
En otras ocasiones interviene la originalidad en los trazos del susodicho(a) o ya sea la utilización de un realismo impactante o una síntesis encantadora.
Como podrán ver Adam Hughes es un artista extraordinario, su calidad artística no se reduce a la aplicación del grafito al papel, en algunas de las obras que presentamos podrán ver que la aplicación de color por computadora redondea a la perfección cada pieza.
Hasta este punto ustedes dirán que hay cientos de artistas con aptitudes similares o superiores, entonces ¿qúe tiene este tipo en especial?
Pues bien si para ustedes no es suficiente lo que hemos contado, déjenme decirles que el señor Hughes es reconocido a nivel mundial por ser un Good Girl Artist.
Para comprender lo que el término implica,hagamos un poco de historia: durante los años cincuenta el cómic estadounidense estaba en la cima, grandes volúmenes de producción y una gran variedad de títulos. Había una gran libertad creativa y dentro de ése escenario aparecieron las Bad Girls o chicas malas.
En resumen las chicas malas eran féminas retratadas de manera liberal para los tiempos: enseñando piernas y brazos desnudos además de asumir poses muy sugestivas. Los personajes además eran referente de contrapartes masculinos ya explotados con anterioridad, así encontramos vaqueritas que ostentaban tremendo látigo o la mujer citadina portando un revólver.
Pues bien, a los artistas designados para dibujar y en muchas ocasiones pintar a estas niñas malas se les designó genéricamente como Bad Girl Artists.
Ahora bien un Good Girl Artist como Hughes se encargan de representar chicas buenas en todos los sentidos posibles.
Para terminar, debemos aceptar que no todo es miel sobre hojuelas, no. El referido señor Hughes, tuvo a su bien crear un síndrome. El sídrome Hughes se explica así: la calidad artística es inversamente proporcional a la rapidez con la que desarrollan su trabajo.
Sí niños y niñas, todos los artistas que sufren de este síndrome (entre ellos Travis Charest, Jimm Lee, Jeff Scott Campbell y Joe Madureira) no son capaces de trabajar en un título regular porque no pueden dibujar las 24 páginas mensuales a tiempo. Pero bueno, a nosotros lo que realmente nos importa es ver los resultados de su trabajo.
Comicómico.

Comentarios

  1. Ah mira, siempre se aprende algo nuevo. es muy diferente el trabajo de estos artistas al de los mangakas que deben entregar un capítulo cada semana. Excelente post.

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